Resumen del trabajo final de investigación de la autora
La institucionalización de las personas mayores es hoy una creciente realidad, y en este escenario el uso de sujeciones físicas es una rutina aceptada en los establecimientos para personas mayores. Esta investigación tiene como objetivo estudiar los facilitadores y los obstaculizadores para la eliminación de las sujeciones físicas en estos establecimientos, siendo la formación el facilitador más importante y los prejuicios el principal obstaculizador.
Se realizó un estudio de tipo cualitativo en un establecimiento privado para personas mayores de la Ciudad de Buenos Aires, certificado como “centro libre de sujeciones” bajo el Programa Desatar al Anciano y al Enfermo de Alzheimer, administrado por la Confederación Española de Organizaciones de Mayores. La técnica utilizada fue la encuesta, la cual que fue administrada por la investigadora a todo el personal del establecimiento, integrado por 64 personas. Las encuestas fueron aplicadas en forma de entrevista y fueron acompañadas por la observación directa.
Los principales resultados fueron que más de la mitad del personal de la residencia considera que no es necesario usar sujeciones físicas en las personas mayores institucionalizadas para evitar que deambulen de manera errática, tomen objetos o molesten a otras personas, ni para proporcionarles descanso o seguridad o para sustituir la vigilancia del personal; sin embargo, parte del equipo reconoce su utilidad para evitar que se arranquen un catéter o sondas y en menor medida para proteger que se caigan de la cama, siendo principalmente personal de enfermería y asistencia directa del centro quienes tienen esta consideración.